Los padres pueden observar comportamientos diferentes con los demás niños de la edad de su hijo, así como una maestra puede tener sospecha sobre un trastorno o dificultad de un niño para desarrollarse, la evaluación ayuda a diagnosticar donde se encuentra los motivos para estos comportamientos o si se haya acorde a su edad.
Consta de un número de sesiones establecidas donde mediante escalas, test y pruebas psicológicas se evaluará el área maduracional, cognitiva y emocional, para poder llegar a una intervención más especializada y eficaz.